Málaga estará conectada por AVE con cinco grandes capitales en 2010

En un escenario de continuos aumentos de precio de los combustibles, carreteras colapsadas y con una de las tasas de accidentalidad más elevadas de Europa, la alta velocidad se ha situado como primera prioridad del Gobierno en materia de transporte. Y Málaga es protagonista en este cambio radical de concepción viajera.

Diciembre de 2007. Es la fecha prevista para la conclusión del soterramiento de las vías a su paso por la capital -las obras comenzaron el pasado 1 de marzo- y para la llegada del primer AVE a la remozada estación de Héroe de Sostoa (Vialia). Cuando esté a pleno rendimiento será posible viajar de Málaga a Madrid en dos horas y media (Ahora se requieren cuatro horas y cuarto, casi igual que hacerlo en coche).

Costará unos 69 euros, tanto como un viaje en avión, aunque con la ventaja de que el tren va de centro a centro de ciudad y no requiere llegar con antelación al aeropuerto ni facturar. En menos de cinco meses quedará abierto el recorrido de alta velocidad entre Antequera y Córdoba, lo que, unido al nuevo intercambiador de ancho de vía, acortará el viaje a Madrid a poco más de tres horas y media. La obra es responsabilidad del Ministerio de Fomento.

En paralelo, a finales del próximo año Renfe comenzará a operar en alta velocidad entre Málaga y Córdoba, la segunda ciudad que tendrá conexión directa ferroviaria con la Costa del Sol. Ambas ciudades se quedarán a escasos 55 minutos. Será una hora y media cuando funcione la estación de Santa Ana, a finales de año, mientras que, desde Antequera, el viaje a la capital de la Mezquita se reducirá a 40 minutos. Ambos trayectos los realizarán previsiblemente cabezas tractoras de la serie 104 de Talgo, capaces de alcanzar los 250 kilómetros por hora.

De costa a costa

Un año más tarde, en 2008, se podrá viajar en ferrocarril hasta Barcelona en menos de seis horas. El tiempo de trayecto entre ambas ciudades actualmente se prolonga durante 13 horas y se reducirá a menos de la mitad gracias a la nueva línea.

Así ocurrirá en el servicio diurno. El trayecto nocturno también se reducirá gracias a la entrada en servicio de trenes-hotel de última generación. Partirán a las 23.00 horas y llegarán a su destino sobre las siete de la mañana del día siguiente. Circulará a una punta de 300 kilómetros por hora y contará -al igual que en el trayecto a Madrid- con las últimas medidas de seguridad existentes hasta el momento.

Ello será posible también gracias a la mejora del trayecto entre Madrid y Lérida, que a día de hoy no puede circular a más de 200 kilómetros por hora por un problema en los sistemas de señalización necesarios para superar esa velocidad, y que estará lista el próximo año.

Un cuarto corredor ferroviario se encuentra ya en obras. Es el que unirá Málaga y Sevilla, que ejecuta la Consejería de Obras Públicas de la Junta. Entrará en servicio en 2010, y a partir de ese momento el viaje se podrá realizar en 75 minutos, la mitad que en la actualidad. Cada hora saldrá un tren por sentido, lo que, unido a la considerable reducción de tiempo respecto al coche, aportará a Renfe más de 2,5 millones de usuarios al año, según los estudios de viabilidad efectuados por el Gobierno andaluz.

En una fase más retrasada de tramitación se encuentra la conexión entre Málaga y Granada, que no estará lista al menos hasta finales de 2010. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), dependiente del Ministerio de Fomento, adjudicó en junio por 33,7 millones las obras de construcción de la plataforma y vía del primer tramo de la línea de alta velocidad entre Bobadilla y la ciudad de la Alhambra, con un plazo de ejecución de 21 meses. Afectará a un trayecto de poco más de seis kilómetros entre Valderrubio y Pinos Puente (Granada).

A Granada en tren

No obstante, este es sólo el primero de los 11 tramos en que se divide el proyecto, y que se encuentran en distintas fases de tramitación (El grueso está aún en estudio informativo). También contempla la reforma de la estación de la capital granadina, tal y como ha ocurrido en Málaga. Cuando culminen los trabajos, el trayecto entre ambas ciudades se reducirá a una hora y cinco minutos. Según las previsiones, este corredor, para el que hoy ni siquiera hay conexión directa, tendrá más de 1,2 millones de pasajeros al año.

Noticia extraida de: Sur Digital.