Lo más económico, un piso compartido. Aunque el alza inmobiliaria ha repercutido seriamente en el bolsillo de los estudiantes. Juan Román, asesor de ventas, asegura que en el último año el precio de alquiler se ha encarecido en 100 euros mensuales, consecuencia directa de la subida del precio de la vivienda. Según fuentes económicas consultadas, el precio de la vivienda en Málaga se ha incrementado en un 12 por ciento, lo que hace que los arrendatarios de viviendas nuevas encarezcan la cuota de alquiler de forma proporcional. «Hace dos años pagaba 120 euros de alquiler, ahora pago 200. Sin becas no se puede hacer frente a este gasto», afirma Gala Rojas, estudiante cordobesa de 3º de Educación Social, que comparte su piso con otras dos chicas. Como a ella, a muchos estudiantes les cuesta llegar a fin de mes. Otros datos elaborados por idealista.com estiman que alquilar una habitación en Málaga cuesta una media de 291 euros al mes. Aunque depende de la zona.
Vivir en Teatinos, o hacerlo en Carretera de Cádiz supone una diferencia de 200 euros. Un piso de tres habitaciones en la primera zona oscila los 750 euros al mes, frente a los 550 de Carretera de Cádiz. En el centro histórico de la ciudad, el baremo se mantiene en los 800 euros mensuales. Estos datos evidencian que la diferencia abismal que existía en años anteriores entre vivir en una residencia o en un piso compartido se ha ido reduciendo. Según ha podido comprobar este periódico, hace dos años la diferencia alcanzaba los 250 euros. En la actualidad, no supera los 100. Sin embargo, esta opción es escogida sólo por el 12 por ciento de los universitarios de fuera de Málaga. Balcón del Romeral, ubicada en Teatinos, es la más cercana al recinto universitario. Alberga más de 200 plazas y su precio incluye alimentación y limpieza, además de servicios de lavandería y conexión a internet. Responsables de la UMA coinciden en la escasez de subvenciones públicas para el alojamiento, que afecta a los estudiantes con menos recursos. En este sentido dispone de una única residencia, Alberto Jiménez Fraud de Portada Alta que cuenta con 257 plazas, un número escaso para la importante demanda de solicitudes que registra. Al margen de esta, los estudiantes cuentan con 150 plazas becadas por la Junta distribuidas entre la residencia Andalucía y La Rosaleda.
Por otro lado, la Diputación de Málaga también pone al servicio del universitario 40 becas subvencionadas que aportan una cuantía mensual de 160 euros.
Estudiar sale por un ojo de la cara. Los alumnos establecidos en la capital además de cambiar temporalmente de domicilio, deben hacer vida diaria, lo cual implica que sus necesidades revierten en beneficios económicos para la capital. Compran en los supermercados, salen de fiesta y adquieren productos en comercios malagueños. Este dispendio supone un gasto de casi 6.000 euros por curso académico, sin mencionar el pago de la matrícula.
A pesar de que la oferta de alojamiento universitario es muy amplio, lo cierto es que las viviendas de régimen de alquiler han bajado en los últimos años un 7,4 por ciento, lo que representa sólo un 12 por ciento del cómputo global de viviendas en Málaga, según datos del Observatorio Joven de la Vivienda.
Me pregunto : porque aquella persona que no tiene propiedad inmobiliaria lo tiene tan dificil?…