En este sentido, expuso que la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) exige un mínimo de cinco metros cuadrados por habitante; la Unión Europea (UE) recomienda 15 metros cuadrados por habitante y la Organización Mundial de la Salud (OMS) 20 metros cuadrados por persona.
Asimismo, indicó que en el PGOU de la capital se señala que existen 9,2 metros cuadrados de zonas verdes por habitante porque se contabilizan áreas verdes “alejadas, calificadas como sistema general pero para las que en el documento no plantea ningún tipo de intervención”, por lo que consideró que se han incluido “para que la media salga más alta”, aseveró.
Entre estas áreas se encuentran la zona norte del Puerto de la Torre, la zona norte de las Virreinas y la presa del Limonero, el norte de las rondas y el norte del monte de San Antón.
Bustinduy explicó que el propio documento reconoce el déficit de zonas verdes de la ciudad e “incluso describe los lugares deficitarios en zonas verdes”, como son los distritos de Carretera de Cádiz, Cruz de Humilladero y Bailén-Miraflores, “zonas que además son las más pobladas de la capital”. También insistió en que para elevar la media “se han incluido zonas que no son de uso ciudadano”.
Por otra parte, añadió que al calificar de suelo rústico como sistema general, el documento posibilita que luego se convierta en urbanizable. “No es una hipótesis, porque en este momento tenemos ejemplos muy evidentes de que eso es así” ya que “durante el verano hemos visto cómo hay suelos que han pasado de rústicos a residenciales”, refiriéndose “a cómo se han calificado en este documento suelos del monte de Gibralfaro”.
La portavoz del PSOE explicó que su grupo propone que “los suelos que se han pintado como zonas verdes se queden como rústicos”, e incluso “en el caso de que la propiedad de ese suelo sea privada, que las administraciones colaboren y ayuden en el mantenimiento de los mismos”.
“Si Málaga aspira a ser una gran ciudad, que tiene potencialidad para serlo, necesita atributos de gran ciudad”, destacó, al tiempo que resaltó que “Málaga necesita grandes áreas verdes para aumentar la calidad de vida de los ciudadanos, porque son atributos de grandes ciudades y porque necesita que haya una masa verde” para absorber los ruidos.
Marisa Bustinduy./ Portavoz municipal socialista
Tres proyectos serán la clave para el futuro de Málaga
Según Bustinduy, existen tres proyectos que marcan la diferencia entre su modelo de ciudad y el del alcalde, Francisco de la Torre, como son Arraijanal, los antiguos terrenos de Repsol y Gibralfaro. Así, manifestó que para Arraijanal el regidor propone “eliminar la playa para hacer un puerto deportivo, viviendas de lujo y zonas comerciales”, mientras que para Bustinduy “es necesario crear un gran parque de uso y disfrute ciudadano”, porque “no podemos perder la oportunidad de oro de trabajar en una zona, la única de todo el litoral de la ciudad que se conserva en estado natural”.
REVISIÓN DEL PGOU
Buscar una salida a la situación de la capital
Bustinduy destacó que para su grupo es “prioritario” que Málaga tenga un PGOU “porque hay que darle salida a la situación en la que se encuentra la ciudad”. Así, dijo que la postura del PSOE respecto a la elaboración y al propio documento “ha sido la de buscar y trabajar con el consenso como una clave imprescindible” para que “sea un documento lo más rico posible, donde se contemplen la mayoría de las sensibilidades”. Además, señaló que “un documento de estas características se va a administrar durante mucho tiempo y lo razonable es que todos nos sintamos identificados con él”. Bustinduy recordó que en el pleno de aprobación inicial del PGOU «nos vimos obligados a votar que no” por “el fondo y por la forma”.
Noticia extraida de: Diario Málaga